viernes, 27 de mayo de 2011

Escuche, senyor Felip Puig






El vídeo lo grabó mi amigo Javier Puebla en la Puerta del Sol, la medianoche siguiente a las últimas elecciones. Que los políticos electos sigan metiendo la pata como la ha metido hoy el ciudadano Felip Puig, conseller de la porra de la Generalitat, al ordenar el desalojo contundente de la Plaça de Catalunya de Barcelona (con el pasmoso motivo de despejar el espacio público para un acto de una entidad privada, como lo sería la celebración de un eventual triunfo del Barça en la final de la Champions). Que sigan, sí, y habrán de irse acostumbrando a ese estruendoso silencio, y al sonido que finalmente lo rompe. No parecen enterarse de que sí, algún perroflauta habrá, pero esto viene de mucho más hondo, y va por ellos.




La policía puede detener y/o denunciar al que desobedece las órdenes de la autoridad, puede repeler a quien le pone una mano encima (quien hace cualquiera de esas dos cosas, ya sabe a lo que se expone, en un estado de Derecho). Pero pegar a quien sólo alza las manos siempre ha sido una indignidad. Aquí y en Pekín, ahora y en la Edad Media. Y por encima de todo, en democracia, es un inmenso error. Quien les ha dado esas órdenes a los ciudadanos policías de la imagen, les ha hecho un flaco favor. A ellos como individuos, primero, y después, a la institución a la que pertenecen.

Abrazos

4 comentarios:

kutxi dijo...

No me parece correcto, Lorenzo, esa forma de liberar de responsabilidad a los que tu llamas "ciudadanos" y que más bien parecen "esbirros". Cierto es que quien da las órdenes es indigno, pero no es menos indigno quien las lleva a cabo. Los despreciables individuos que arremeten contra los ciudadanos indefensos a los que deben defender y pagan sus sueldos tienen su cuota de responsabilidad, también. Hay que ser muy mala persona para actuar como actúan los "prodisturbios" del segundo vídeo. ¿Siguen órdenes? También seguían órdenes los guardas de los campos de concentración nazis. Seguir órdenes no descarga a nadie de responsabilidad, pues siempre queda la opción de no seguirlas.

Silva, Lorenzo dijo...

Relee la entrada, Kutxi, y dime dónde los relevo de responsabilidad. Creo q ue la palabra indignidad es bien elocuente, bastante poco equívoca.

Pero lo cierto es que su error está mediatizado por una orden recibida de la autoridad legítima, y ellos no son jueces y tienen el deber de obedecer. En esas circunstancias, sí creo que más responsable es el conseller que no obedece a nadie, y que es el que toma la decisión.

kutxi dijo...

Lorenzo, quizás es exagerado lo que dije de que liberabas de responsabilidad a los agentes. Pero sí creo que atenúas su responsabilidad. En la entrada y en tu contestación cuando dices que tienen el deber de obedecer.

Cito el artículo 104 de la Constitución Española:

Las Fuerzas y Cuerpos de seguridad, bajo la dependencia del Gobierno, tendrán como misión proteger el libre ejercicio de los derechos y libertades y garantizar la seguridad ciudadana.

Fuente: http://www.policia.es/cnp/normativa/normativa_ce_104.html

Su función no es obedecer a ciegas, como si fueran autómatas, cualquier orden que reciban por descabellada que sea. Su función es proteger a los ciudadanos. Lo que hemos visto hoy no ha sido a la policía cumpliendo con su deber, más bien todo lo contrario.

Todo esto lo digo, quede claro, sin ningún tipo de animosidad hacia ti. Pido disculpas, de todas formas, si en algún momento el cabreo tan gordo que tengo dentro se deja notar en lo que escribo.

Saludos.

Isabel dijo...

Aquíy en Pekín el responsable último de estos actos es el que manda al Conseller, Artur más, o el Ministro del Interior, Rubalcaba, o el Presidente del Gobierno de España (que no de España)Zapatero. Pero curiosamente no he visto a nadie quejarse de ellos ante estos hechos.