jueves, 11 de noviembre de 2010

Dronningen uden spejl





O lo que es lo mismo, "La reina sin espejo", pero en danés. Los exquisitos editores de EC siguen apostando por Bevilacqua, después de traducir "El alquimista impaciente" (que les fue, y me congratulo, especialmente bien). En esta ocasión escogen su novela barcelonesa, una prueba más de lo bien que se ha vendido esta ciudad en el mundo desde 1992. Y en la portada, una de las joyas absolutas e indiscutibles de la capital catalana: la Sagrada Familia (por cierto, qué bochornoso el tratamiento mediático de su apertura al culto, no he podido dejar de quejarme en un artículo que podéis leer, entre otros sitios, aquí).

En fin, el libro ya ha recibido alguna crítica en Dinamarca. Para muestra y para quien lea danés, ésta. Parece que algún lector de allá se queja de que la serie no se esté publicando en orden, para seguir mejor la evolución del protagonista. En descargo de mi editor danés diré que ya es bastante arriesgado tratar de introducir a un autor extranjero, como para no permitirle que opte por los títulos que cree que tendrán más tirón dentro de la serie.

Por mi parte, le estoy agradecido y quería celebrarlo con vosotros.

Abrazos.

3 comentarios:

Pilar dijo...

Pues enhorabuena. Ojalá tu editor danés se lleve también "La estrategia del agua" a esas tierras.
Lo de no publicar todas las novelas de la serie no es relevante para engancharse a ella. Doy fe de ello.

Paco Gómez Escribano dijo...

Enhorabuena, Lorenzo. De acuerdo con Pilar en que para engancharse no es necesario leerlas en orden. Pero para los estudiosos sí que es vital tenerlas todas y es una pena que en Dinamarca no se publiquen todas, aunque, es de suponer que todo se andará. El artículo sobre Gaudí, genial. Un abrazo.

P.D.: Publicarán mi novela (la segunda) en Diciembre. Ya estoy corrigiendo la maqueta para reenviarla a la editorial.

Unknown dijo...

Buenos días, ¿alguien puede decirme en qué muicipio tuvo su residencia Neus Barturel? A mi me da por pensar en Tarazona o en Barbastro, estoy intrigada.

Por otra parte, no es habitual encontrar una novela en el que tanto el protagonista como su ayudante tengan su protagonismo tan bien repartido. Como Sherlock Holmes y Watson.

Mil gracias,

Vladimira